Matt Crafton mantuvo la punta, resistiendo la embestida en las últimas vueltas por parte de Austin Dillon para llevarse la Coca-Cola 200 en el Iowa Speedway.
Austin Dillon mostró tener el carro más dominante en la competencia, pero tuvo una mala detención en los pits en las vueltas finales de la carrera que le costó la victoria.
Pasada la mitad de la prueba, un fuerte choque ocurrió en la recta principal. Justin Marks perdió el control de su camioneta tras tocarse con Max Papis, pasó por encima del césped que separa la calle de los pits con la pista y terminó chocando contra el muro interno de la pista, soportando un fortísimo golpe que provocó daños inclusive en el muro de la pista. Marks fue llevado a un hospital a pesar de haber salido por su propia cuenta del vehículo, pero fue reportado que estuvo alerta en todo momento en el centro médico.
La mala detención en los pits para Austin Dillon le costó 7 puestos a quien entonces era el líder de la prueba. Al reiniciar la carrera, Dillon logró una increíble recuperación al avanzar desde la octava posición hasta la segunda en sólo 11 vueltas. Fue cuando empezó el ataque del piloto del coche número 3 contra Matt Crafton; una batalla que llegó a ser lado a lado a 13 vueltas del final, pero en donde Crafton logró mantener la punta y lograr una pequeña ventaja contra Dillon, que no pudo volver a arremeter al final a Crafton. Así el piloto de la máquina 88 logró su segundo triunfo en su carrera en la Camping World Truck Series.
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